Por
Roberto Marra
Se
fue tal como llegó, dejando sorprendidos a todos. Trazó una raya en
la historia, atravesó su tiempo con palabras sencillas y hechos
enormes. Sembró de alegrías el presente, abrazó las causas de
todos con la pasión del militante que nunca abandonara. Sinceró la
política, le arrancó de cuajo la hipocresía, derrotó a los
soberbios y apabulló a los eruditos.