La ley contra el racismo y contra todo tipo de Discriminación ha planteado en la hermana Bolivia todo tipo de resistencia, pero no de las mayorías, sino de una minoría bastante acotada pero influyente, porque es dueña de los medios de difusión y por ha sido dueña casi de todo en estos 200 años o casi 500 años, según como se mire.
Es una Ley que junto a otras medidas tomadas por el gobierno de Evo Morales hacen vivir a los bolivianos una revolución pacífica, la violencia la ponen la contra, la oligarquía mal acostumbrada a disponer de todo y todos. Esa discriminación se ejerció y se ejerce todavía contra originarios, afrodescendientes, mestizos y mujeres, ese racismo se ejerció de tal forma que se llegó al límite de que en Bolivia hubiera, todavía en el tercer milenio, esclavitud. Fenómeno que hemos visto en pasadas ediciones de Sudestada, cuando funcionarios de gobierno entraban casi a la fuerza en propiedades de latifundistas y allí se encontraban con familias viviendo en condiciones de esclavitud.
El racismo, el desprecio por la propia gente llegó a tal punto que el otrora dictador Hugo Banzer Suárez promovió en un momento la llegada de colonos sudafricanos blancos, y también el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial -un organismo de la ONU- desde 1975 y hasta el 2003 pidió a Bolivia la sanción de leyes contra la discriminación, contra el racismo y que lo tipificaran como un delito. Las autoridades de siempre nunca accedieron al pedido de la ONU.
Y allí surge otro detalle en común en nuestra historia latinoamericana, cuando nos sumergimos en nuestra historia argentina para recordar el desprecio de vecinos de Bs. As. hacia los diputados llegados de las provincias para conformar la Junta Grande a fines de 1810, o aquellas expresiones vertidas con motivo de la oleada inmigratoria de españoles e italianos, “solo falta que vengan chinos” o aquella de “traer blancos alemanes o estadounidenses para inseminar a las chinas.”
Decimos racismo, desprecio hacia nuestra gente y también desprecio hacia la propia Patria, por estos días otra vez, y es la tercera vez desde el 2003 que vuelve a replicarse el titular periodístico acerca de que el FMI sancionaría a la Argentina, y es la tercera vez que las autoridades del Fondo explican que ellos no sancionan a nadie, la noticia ya todos saben de dónde sale, del monopolio Clarín y luego un coro de cotorras lo repite incansablemente sin tomarse la molestia de chequear esa información. Otra vez la historia, Sarmiento, asesino de gauchos e indios si los hay, ejercía el periodismo desde Chile y conformaba lo que en aquella época se denominaba La Legión Argentina, opositores al gobierno de Rosas que vivían y conspiraban desde los países limítrofes.
Sarmiento en su énfasis por oponerse a Rosas criticaba todo, todo estaba mal como ahora, incluso apoyó las pretensiones de algunos sectores chilenos territoriales sobre la zona de Cuyo. El Director de uno de los diarios donde escribía Sarmiento un día le comunicó la vergüenza que sentía al ver como Sarmiento despreciaba a su propio país y no dudaba en perjudicarlo si ello lo ayudaba a oponerse a Rosas.
Ya pasaron unos 170 años, y cipayos siempre hubo y los hay, el FMI no va sancionar nada y no tiene porqué meterse aquí. Ya lo han hecho en demasiadas oportunidades y así nos fue. Y hablando de cipayos que dejaron a la Argentina destrozada cuando les tocó gobernar. Sabido es que se ha reducido sustancialmente la deuda externa pero todavía queda una porción importante. Hace apenas días nuestra presidenta Cristina estuvo en la Feria Internacional del Libro en la ciudad germana de Frankfurt. Algunos funcionarios judiciales y abogados intentaron acercarse a ella porque representan a acreedores germanos y quieren cobrar.
Intentaron buscarle la vuelta embargar el avión en el que se trasladó Cristina y su comitiva pero el avión pertenece a la Aerolínea y no al gobierno argentino, igual quisieron hacer con el mega stand argentino en la Feria, pero todo pertenecía a terceros. Entonces solo se limitaron a quejarse por el trato dispensado a la Argentina en general y a la presidenta en particular, uno de los abogados consideraba inaceptable que se le desplegara una alfombra roja y que almorzara con la premier Ángela Merkel a costa del contribuyente alemán. Es decir, gracias a los gobernantes anteriores al 2003 todavía tenemos deuda que hay que ir afrontando y negociando a cara de perro.
Y para ir terminando, aquellos que poseen correo electrónico Hotmail, habrán visto en la página de inicio del MSN una noticia acerca de la Argentina y su riqueza natural. Según el informe del Foro Mundial para la Naturaleza Argentina ocupa el 9º lugar en cuanto a riqueza natural. Los 10 lugares son para China, EE.UU. Rusia, India, Canadá, Australia, Indonesia, Brasil, Argentina y Francia. El informe dice que estos países cuentan con el 60% de la capacidad de la Tierra para proveer servicios ambientales de importancia global como la producción de alimentos y la captación de dióxido de carbono.
Entonces nada mejor que recurrir a las fuentes, a algunas palabras de Perón… pronunciada por el presidente Chávez el año pasado en ocasión de recibir a nuestra presidenta Cristina en Venezuela.
E imposible no expresar la satisfacción sobre el exitoso rescate de los 33 mineros, imposible no adherir a lo dicho por el jefe de turno rescatado, lo primero que le dijo al presidente Piñera: esto no puede volver a ocurrir. Es que el circo mediático, o calla todo o hace demasiado ruido para distraer. Así nada se dijo que desde el final de setiembre se ha iniciado un juicio a los dueños de la mina por las condiciones de seguridad insuficientes y a los funcionarios públicos por no cumplir con las inspecciones. Están pidiendo el pago de 1.000.000 de u$s a cada minero. Terminó el circo mediático y siguen muriendo mineros, circo que nunca se ocupó de la huelga de hambre de mapuches. De todos modos la realidad siempre se impone, y continúan muriendo mineros.
*Columnista del programa Sudestada
emitido por Radio Nacional Rosario AM1300 - Sábados de 7 a 9.30 hs.
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