Imagen Tiempo Argentino |
No se trata de creer a pie juntillas en las encuestas. Se sabe que
generalmente están operadas, que los márgenes de error son la técnica que
utilizan para volcar los resultados a uno u otro lado, que la publicación de
los guarismos está en concordancia con los medios en los que se publican y que,
como todo en la política, también existen trabajos serios que están hecho con
absoluto profesionalismo más allá de errores de buena fe. Por eso no voy a
utilizar los datos como realidad absoluta pero sí como verdad publicada.
La semana pasada se dieron a conocer los resultados de una encuesta sobre el tema de la confianza política de la oposición y del oficialismo. En ese trabajo se medían las percepciones de una parte de la sociedad respecto de los liderazgos políticos. Y arrojó un dato asombroso que habla, de alguna manera, de la resignificación de la política que hizo el Kirchnerismo en los últimos 11 años.
La semana pasada se dieron a conocer los resultados de una encuesta sobre el tema de la confianza política de la oposición y del oficialismo. En ese trabajo se medían las percepciones de una parte de la sociedad respecto de los liderazgos políticos. Y arrojó un dato asombroso que habla, de alguna manera, de la resignificación de la política que hizo el Kirchnerismo en los últimos 11 años.