LA OPINIÓN DE LOS QUE TIENEN VOZ, Y LA MORAL SIN DOBLECES NI ULTRATUMBA

Por Gustavo Daniel Barrios*

Repasé diarios viejos como muchas veces, de semanas, y se me esclareció el hecho del rejuvenecimiento que suele operarse cuando la gente ha desatado los nudos que la postergan, y al distinguir lo oprobioso se interesa por ubicarse en el terreno de lo que es justo. Actores políticos y legistas explican por qué es inadmisible estancarse más.

En el suplemento por los 29 años de democracia de Tiempo Argentino, decía Juan Manuel Abal Medina: “Veníamos de años de no se puede. No se podía juzgar a los genocidas –juzgar a los asesinos y sostenerlo, es decir, sin plazos, esa política, agrego, hasta terminar la demanda-, no se podía recuperar el rol estratégico del Estado en la economía, no se podía resistir tres tapas de Clarín...... –y más adelante agrega-: Injuriada como ningún otro, Cristina fue reelecta con 38 puntos de ventaja sobre el segundo.......y demostró que nunca fue imposible vencerlos.”

Un par de días después en otro matutino, el Centro –ecuménico- Nueva Tierra, opinaba que el documento último de la ronda episcopal, “parece hacerse desde la agenda y los temas de interés de los grandes grupos”. El portavoz de este centro más adelante agrega en este, uno de los al menos dos documentos de réplica que hubo sobre la infeliz declaración, y hablando de lo omitido sobre el rol de la iglesia en la dictadura, y sobre esas cosas, como las legitimadas misas dentro del penal, de Christian Von Wernich, cómplice de homicidios, que: “el silencio, la evasión, la vaguedad, son elocuentes para comprender la posición de los obispos como actores políticos en el momento actual, porque la pasión por la verdad no se entiende sin la pasión por la memoria y la justicia.” –subrayó la declaración de Nueva Tierra.

Es decir, se habla aquí de la incongruencia con la verdad. Otra de las réplicas llegó desde los curas de “Opción por los pobres”, quienes calificaron varios días antes, de “pobre e insuficiente” el documento en cuestión. Los sacerdotes dicen, en un párrafo central: “Debemos confesar que nos escandaliza que ante la sociedad parezca que usar condones sea más grave que torturar, que el sexo prematrimonial sea más grave que violar mujeres detenidas-desaparecidas, que engendrar hijos fuera del matrimonio sea más grave que expropiarse niños después de tirar al mar a sus padres, que la homosexualidad es una enfermedad perversa y más grave que ser torturador o presenciar con sadismo y complicidad sesiones de tortura, que el aborto de una mujer angustiada en su situación de embarazo no deseado sea tenido por homicidio y como algo mucho más grave que arrojar personas vivas al mar, atadas, dopadas, y secuestradas.” Este párrafo de la OPP es crucial para conmover una desfachatez que por otra parte se descascara y ablanda sola. Dicho porque los delitos y las monstruosidades de todos los ejemplos segundos apuntados por la OPP, del análisis del discurso episcopal, a los obispos ni antes ni ahora les importa un pepino esa tal perversidad de ellos mismos.

Se me ocurre que la luminiscencia de la realidad en su vasta complejidad, hoy aparece como si avanzáramos por un cañadón dispuesto por la Historia. En la edición donde figura el análisis vertido por Nueva Tierra, aparecen también unas palabras de Javier De Luca, fiscal, y voz cantante posterior a una solicitada de cientos de magistrados y funcionarios –De Luca es uno de ellos-, publicada a los efectos de tomar distancia de la Comisión Nacional de Independencia Judicial, y de tomar distancia de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional, que vendrían a ser los elegantes todos amigos de Moner Sanz, o una especie de SIP argentina para la corporación de los jueces, dicho en forma clara y para que se entienda. Algunos de los conceptos del fiscal, haciendo hincapié en la necesidad de dejar las referidas asociaciones, fueron: “Me ha pasado de denunciar a socios en causas de lesa humanidad, como el juez Otilio Romano, y la asociación ha salido a defenderlo.” Otra fiscal dice cosas en el mismo sentido en la nota, y De Luca más adelante concluye: “Yo formalmente puedo trabajar –parodia-, pero puedo no resolver nada, puedo no ponerme los pantalones largos para evitar pronunciarme sobre el fondo del asunto de una vez por todas”...... “¿Cómo voy a tomar como presión una recusación o que exijan que se resuelva una cautelar? Estamos –decía- ante la cautelar más larga de la historia.” Y para cerrar: “Nadie sabe por qué se pide la inconstitucionalidad de una ley –de medios-, cuál es el planteo jurídico............. “hay un oscurantismo digno de la Edad Media que no tiene nada que ver con lo que debe ser un poder judicial.”

Es un buen momento para enfrentar lo incongruente con una vida de aprecio a la verdad y al progreso. Porque antes, todos aquellos que desde siempre están orientados a la moral sin dobleces, inquebrantable pero a la vez defensora de la libertad, una moral que comprende al instante las razones de la eutanasia, por ejemplo, esa gente no podía conjurar el maleficio de los mentirosos. Hoy se simplificó el panorama y los atajos al establecimiento de la justicia se han vuelto transitables.

Doy un caso: Si un dirigente rural, defiende la compra de un predio ferial, que se le compró al Estado –en ese entonces usurpado por los que decían ser amigos y ejecutaron el plan de los enemigos-, a precio vil, lo que es decir acuerdo leonino, por medio del cual se le hurtó al conjunto poblacional, que en lo individual, cada uno de los nacidos en Argentina es dueño de la cuarenta millonésima parte de los bienes del Estado Central; digo, que si un dirigente rural así procediese, de automático quedará pasible de ser hallado en flagrante actitud antipopular y antinacional, aunque no sea la comisión de un delito, en razón de que es un ataque al país, y si se quiere desde sólo dos horas después de la tal declaración pública, o inmediatamente, quedará pasible de que desde el ambiente jurista honroso hacia lo democrático, se lo denuncie –al dirigente que pretendiese recuperar el siniestro acuerdo leonino a favor de los privados, sus socios-, ante el poder judicial, con la pretensión legítima de generarle una ejemplar sanción.

Es tan simple que a veces no se entiende cómo es que se dejan pasar estas cosas que son asuntos emblemáticos, porque los bienes de la Nación Argentina debieran involucrar a muchos con preferencial gran fervor, y su defensa ser como el payaso de resorte acude presto, el antiguo “Clown-in-the-box”, y responder con inmediatez, de modo contundente, si se los pretendiese –a esos bienes- avasallar.

Aunque después desde algún nicho de corrupción se argumente que no habría tiempo de atender a tan lujosos reclamos, que el sistema judicial es lento desde siempre, y lo excedente como aquello debería archivarse. Y se le responderá que es eso falso, utilizando aquí el payaso de resorte, agregando que el tiempo en estos casos nunca pudiera ser óbice, en tanto todo buen juez –a menos que alguno se declare en discordia con el espíritu de la ley-, tiene la obligación de ser expeditivo cuando el planteo es translúcido y honorable. Y aquí la atención favorable y rápida, de un planteo así, en defensa de lo nacional, no requerirá del trastorno de la demora, ya que está supuesto que los planteos translúcidos son de más rápida resolución. Y tal vez hasta pudiera hablarse de instantaneidad, si el juez tiene claro que la defensa de la soberanía interna, como en el caso del predio ferial, lo eximen de demoras, debido a que no existen razones para no lograr ser expeditivo, contra un dirigente así.

Y un segundo caso para modelar bien la prerrogativa, lo que ambicionamos aquí: Si una coalición política, de 5 o 6 agrupaciones, a lo largo de dos o tres años digamos, fue reincidente en descalificar el desendeudamiento, así como el actual plan está dado, el cual revierte la ecuación siniestra del siglo 20, y privilegia las obras públicas; Perón impulsó alrededor de 62000 obras en su primer mandato, reza su propia declaración en una entrevista al aire libre publicada en la documental de Leonardo Favio Sinfonía de un sentimiento. Bien, digamos que entre 2003 y 2012 se igualó ese número, número sin revisar jerarquía de obras, si así ocurrió fue básicamente, por el sistema de reducción de deuda en esta oportunidad, y franco desendeudamiento, y esta afortunada revertida ecuación, que hace posible, superponer la educación sobre la deuda pública externa, privilegiando a aquella, superponer los planes distribuidos para el desarrollo interno en el entero espectro, y hacerlo sobre la deuda pública, y superponer el apoyo inédito a lo cultural multifacético, sobre la deuda pública externa, todo lo cual compone un dictamen espontáneo: esto es justicia social y un salto de época.

Ahora, y retorno al bosquejo inicial: si una coalición política descalifica sistemáticamente este plan de gobierno más soberano que nunca, e incluso denuncia penalmente a la Presidenta –caso Banco Central-, al sostener ella esta política de justicia social tan enorme antes aludida, y más tarde la Presidenta en 5 o en 6 discursos, explica por medio de la ciencia, cuyos datos de la realidad abruman en un sentido que comprenden hasta los niños inteligentes de once años, y dice, la Presidenta, que se tenía razón, y que nadie pidió disculpas, más que nada al país, por el oprobio de lastimar esta gestión de gobierno con estos logros y, además, siguen siendo soberbios, eso, únicamente eso, es demostrativo de la acción antiargentina de la coalición de legisladores de la oposición que de esa forma conspiraron.

A partir de eso pudiera la sociedad armar un comité, los abogados del justicialismo si quieren, los abogados de Nuevo Encuentro, estamos suponiendo todo; esto se ensancha si sumamos a las asociaciones que sin dobleces también, se ocupan de la defensa de la vida, exceptuando a aquellas que acostumbran alinearse con todas las SIP que las mafias tienen, y exceptuando a las asociaciones “pro vida” que van de ordinario y se alinean con los que andan pidiendo parar con los juicios por delitos de lesa humanidad, y otros falsificadores. Entonces se compone un comité, de reales intenciones de justicia, y van todos al Ministerio Público, que es autónomo, y demuestran en su pedido de auxilio la acción antiargentina flagrante y palmaria de esa oposición, porque hay otras -esto hay que decirlo-, y el fiscal actuante un día estará luego de madurar el caso, en atribuciones naturales para solicitarle a un tribunal, tal vez, desaforar a dichos legisladores, y proseguirse luego el litigio.

Si un grupo de ciudadanos, se arma de paciencia, y desarrolla una ponencia cientificista, inobjetable, que demuestre el trasfondo de aquellas manipulaciones de la realidad, pero demostrarlo como lo pudiera demostrar Copérnico, definiendo hasta el último detalle el proceder malicioso, luego entonces tendrá el juez pertinente, zanjadas las dificultades del sistema, y su propio desapasionamiento si lo tuviere, o asustadiza lenidad también, oportunidad de actuar conforme a Derecho. Yo creo que a los jueces hay que ayudarlos, porque eso es una comunidad organizada. Si vos le facilitás el trabajo el tipo o la tipa te cumplen. Es fija, y esto es una aserción.

La suma de frustraciones se asentó cual güalicho debido a la incapacidad para visualizar los patrones fundantes. Y desde eso sustituir el bien por el dictado de las élites de carácter rancio y acomodaticio. Había esto comenzado con la cuestión de estar impotentes para vencer los retorcidos modelos y esquizofrénicas definiciones de gente, contra la cual han tenido que luchar muchos héroes anónimos, en todo el orbe en cualquier tiempo. Luchadores como nosotros, los que nos vimos urgidos en este último lustro, en disolver los dispositivos fríos y cerebrales aunque reaccionarios, y sobre todo impiadosos, de los fomentadores de la esquizofrenia colectiva. Siempre se trató de lo mismo. ¿Cómo es posible que sigan ocupando un lugar en el Congreso los falsos profetas, que son los profetas del odio, alineados con desfachatez a la intelligentsia del Fondo Monetario Internacional y sus grupos asociados? Hace unas líneas se dijo aquí, asustadiza lenidad, que es síntoma de la pequeñez de una clase media –nunca en su integralidad- supersticiosa, que además repite como loros las barbaridades de un loco, y cuyos más viejos miembros –de esa clase media-, no se han dedicado a pensar desde la época del Fox Trot, cuando lo habían podido conseguir al necesitar hacer sus cartitas de amor para sus parejas. Desde ahí, ostracismo intelectual. Si usted no se penetra de los buenos retóricos actuales, que le dicen miles de veces sin cansar, que los adultos criados en hogares apremiados por carentes de todo, también en algunos casos de afecto, deben de una vez por todas, dejar de obedecer a la élite insultante y misántropa que les anota lo que tienen que decir, y después un día ya se agendaron que los van a liquidar. ¿Se puede confiar en los ladrones de países? Es imposible, porque después que los serviste te borran del mapa. “Tomá mate y avivate” –dicen en el interior-.

Por último y para cerrar, ¿qué sentido los recorre por dentro a estos abuelos fachos más o menos jóvenes, que hoy son, para los ensayistas incluso extranjeros, el último nivel de la periferia de los que tienen olor a podrido de la corrupción moral, cuando enfrentan la mirada de los niños? ¿Qué sentido los recorre por dentro al enfrentar esas miradas en los paseos de la ciudad, o en cada pueblo, niños como los que ellos mismos fueron, desperdiciando su oportunidad? Ahora los observadores fríos somos muy fríos también, eso es verdad.

*Escritor. Miembro de la Asociación Desarrollo & Equidad