CANDIDATOS, SON LOS SEGUNDOS

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Por Roberto Marra

Seguramente asistidos por sus “Focus Groups”, los estrategas del gobierno nacional han instalado la certeza de que la disputa que se da en las elecciones para Senadores de la Provincia de Buenos Aires, es entre Esteban Bullrich y Cristina Fernández. Al parecer, los electores de alguna de estas dos listas, al colocar sus votos solo lo harán por uno de estos dos candidatos.

Pero... ¿qué pasa con los segundos de las listas? Porque se eligen, siempre, tres senadores por Provincia, de los cuales dos son de la lista que obtenga la mayoría y uno por aquella que quede en segundo lugar en cantidad de votos. Por esta razón, lo que se va a dirimir en estas elecciones del 22 de octubre es quien obtiene los votos suficientes para que accedan los dos candidatos de la lista a las senadurías.

Aquí es cuando la estupidez alcanza ribetes mayúsculos dentro de los espacios que se autoasumen como “verdaderos peronistas”, que continúan con la prédica resistente a la candidatura de Cristina Fernández, cuando esto es ya virtualmente inútil, porque aún perdiendo en votos con el Frente Cambiemos, ella accederá igualmente al cargo, por ser la primera de la lista de Unidad Ciudadana.

Los personajes en cuestión, actuales “renegados” de sus anteriores efusivas adhesiones a las gestiones de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, derrochan palabras para expresar su negativa a apoyar a la ex-Presidenta en las elecciones del 22 de octubre, aun cuando algunos de ellos son miembros de la misma agrupación política que el Segundo Candidato de la lista, Jorge Taiana.

Lo hacen a sabiendas de que la verdadera disputa será entre los segundos de cada lista. Por lo cual, será mucho más importante conocer a cada uno de estos candidatos, para saber con certeza cuales pueden llegar a ser las consecuencias de que gane uno u otro y determinar la orientación del voto.

Es eso lo que debieran observar cada uno de esos soberbios sin escrúpulos, que solo parecen querer diferenciarse de quien les otorgó la posibilidad de ejercer altos cargos, con los cuales parece que simplemente buscaban beneficios personales, antes que la de ese Proyecto que, con más aciertos que errores, permitió un importante desarrollo económico y social.

Resulta obvio que las dudas de quienes dicen dudar, solo pueden ser excusas derivadas de la incomprensión histórica del momento que se vive y de sus más que probables derivaciones. O tal vez se trate, en realidad, de simples impostores ideológicos, que solo buscan permanecer, siempre, cerca del dadivoso calorcito del Poder.