El bloque Asociación de Empresarios Argentinos y UIA, en el centro de la foto y de todas las miradas. |
Con la desaparición física de Néstor Kirchner no hay un cambio de gobierno, pero sí un cambio objetivo en el control del poder (la sustitución del ejercicio de mando que el ex presidente ejercía sobre el PJ y los bloques legislativos del FpV, por caso) y, además, el cambio en la observación subjetiva que hagan los distintos actores políticos y económicos sobre la nueva situación. En este sentido, uno de los interrogantes que se empezará a responder en los próximos días es cómo interpreta el establishment, el grupo de presión y poder que representan las cúpulas empresarias, este cambio de escenario.