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viernes, 31 de agosto de 2018

EL SALVADOR

Imágen de "Noticias Urbanas"
Por Roberto Marra
La generosidad no parece tener límites en nuestro País. Esa amplitud permisiva de regresos eternos de lo peor de la sociedad al candelero de las salvaciones imposibles, se repite como un karma maldito del que el Poder se sirve para continuar con sus depredaciones infinitas. El resguardo de esas figuras politiqueras ensalzadas por los medios como los salvadores de la patria (contratista, financiera, evasora, empobrecedora), ha logrado posibilitar esas reapariciones estelares para asegurar el destino de miserias al que nos condenaron hace demasiado tiempo.
El desfile calesitero del “estadista” Duhalde por todos los medios, sin solución de continuidad, día y noche, lanzando “soluciones” unicamente derivadas de sus sueños de perpetuo protagonismo, prepara el camino para la aceptación masiva de candidaturas urgentemente decididas por los falsos opositores del Congreso y los gobernadores cómplices del macrismo.
Mostrando reflejos que envidiarían los deportistas de élite, ya están armando sus listas de candidatos, con proclamas de supuestas soluciones al hundimiento mortal generado por la runfla gobernante. Las críticas son siempre muy respetuosas del estáblishment y sus exigencias permanentes, de manera de asegurarse su sostén en caso de lograr sus objetivos de reemplazo urgente del inútil de la Rosada. La tarea sucia y genocida de éste y sus secuaces, ya ha logrado insertarnos en el peor de los mundos, en el que la embajada y sus aliados locales nos querían tener para facilitar su dominio absoluto sobre las voluntades de quienes se atrevan a agarrar esta “papa caliente” de una crisis terminal.
Ya encontraron la “prenda de unión”, el economista Lavagna, quien aparece como una especie de “genio” salvador, mostrado como el “único” dueño de programas económicos alternativos al actual (si es que existe hoy un programa). Su figura ha sido siempre salvaguardada por los medios, con esa especie de imaginario “respeto” que generaría en toda la ciudadanía. Nada es casual, porque el poder siempre se asegura sus gatopardistas modificaciones ante coyunturas complejas.
El “superhéroe” ya está digitado. La famosa “unidad opositora” se va tiñendo del color de las traiciones a las necesidades populares. Lo importante, lo verdaderamente relevante para los mandamases del imperio y sus socios locales, es evitar que el Pueblo sea quien decida de verdad su destino y, por sobre todas las cosas, mantener a raya (judicial) a la ex-Presidenta.
Cambiar para que nada cambie, es una consigna más que repetida en nuestra historia. Sin importar el costo que impliquen semejantes improperios a la realidad y a las nuevas generaciones, atropellan con vanidades sin sustento y relatos de felicidades siempre futuras, llevándose por delante la soberanía popular a costa de mentiras y biatribas contra la única figura opositora real con capacidad resiliente para encauzar la vida oscura a la que nos condenaron el macrismo, los pseudo-opositores, la parafernalia mediática y la brutalidad o la ignorancia de los votantes.
El “hombre serio” comenzará su desfile televisivo, desde donde nos hablará de sus “serios programas”, del “serio momento” que estamos padeciendo, de la necesidad de ser “serios y responsables”, lo cual, en el lenguaje medroso-conservador, no significa otra cosa que no atacar jamás los planes de los poderosos y el imperio.
La realidad, mientras tanto, se pasea oronda por nuestros bolsillos y nuestras cuentas bancarias, si es que todavía las tenemos. Desaparecen las ilusiones de mejores vidas, hasta el extremo de no saber si mañana podremos comer. La niñez ya no es otra cosa que un estado de sufrimiento que solo preanuncia el siguiente paso de la degradación social. La educación y la salud forman parte de un pasado reciente de felicidades que no se comprendieron. Y la lucecita al final del famoso túnel de la inútil vice-presidenta, resulta ser solo la que nos conduce, con la compañía de estos cómplices, arribistas y falsos profetas de la “renovación” politiquera, a la puerta misma del infierno del Fondo.

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