Páginas

viernes, 14 de julio de 2017

EL NECESARIO FINAL DEL MIEDO

Imagen de "Mente Poderosa"
Por Roberto Marra

El miedo es una reacción instintiva a la percepcion de un peligro, real o supuesto, pasado, presente o futuro. Es una emoción que puede activar reacciones diferentes en los individuos, pero básicamente sensaciones de angustia y ansiedad.
La escuela suele tener, dependiendo de quienes diseñen los planes de estudio y formación, elementos de dominación de los alumnos a través de ese sentimiento transmitido mediante relaciones de poder, puestos de manifiesto con ese fin, por los docentes y las autoridades.
También las relaciones familiares contienen este elemento constitutivo de los procesos de aseguramiento del dominio de unos sobre otros. El patriarcado está construído con el miedo de la mujer hacia el hombre, lo cual puede derivar, en casos extremos, en esos sonados casos de femicidios desatados por imperio de tales relaciones perversas de poder.
La sociedad en su conjunto sufre las consecuencias del miedo como herramienta de dominio de unos sobre otros. Con distintos grados de sutileza (o no) se aplican métodos coercitivos para orientar los destinos de las mayorías hacia lo que le conviene a las minorías empoderadas históricamente como amos económicos y culturales de nuestras vidas.
Mensajes directos o subliminares, frontales o indirectos, llevan a los individuos a temer el desarrollo de sus propios pensamientos, aceptando pasivamente lo que los perjudica a cambio de no despertar la ira violenta de los poderosos. Se convierten así, en mansos reproductores de una sociedad sin libertad ni futuro, como no sea el impuesto por los dueños del Poder.
Pero todo tiene límites en las relaciones sociales. Existen momentos donde el temor deja de ser suficiente barrera para pensar la realidad y verla tal cual es. Son esas situaciones derivadas de los excesos del poder, cuando traspasan límites insoportables, o cuando nada más se tiene para perder.
Allí se desatarán las reacciones que, si son conducidas con razón y coherencia, podrán dar un salto incondicional por sobre los generadores de ese pánico asfixiante, a quienes habrá de apartarse para siempre del comando de nuestras vidas, liberando las fuerzas creativas para abrir paso a una sociedad, definitivamente, sin miedos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario